Pello Azketa muestra su trabajo en Aldealseñor, escenario del documental "El cielo gira"
Sábado, 17/03/2007
INAUGURA HOY UNA EXPOSICIÓN ACOMPAÑADO DE LA DIRECTORA DEL FILME, MERCEDES ÁLVAREZ
Paisajes norteños y arquitecturas mediterráneas se dan cita en la torre del palacio, rehabilitado y convertido en hotel.
ANA OLIVEIRA LIZARRIBAR
PAMPLONA. Hace casi cinco años, el pintor navarro Pello Azketa visitó por primera vez Aldealseñor, un pueblo de Soria apenas habitado por catorce personas, garantes de una memoria colectiva que, como tantos vecinos que pusieron rumbo a las ciudades, estaba a punto de desaparecer. Allí, el artista, al que una enfermedad ocular amenazaba desde hace tiempo con arrebatarle los restos de luz que aún percibía, cruzó su personal técnica de trabajo con las historias y los paisajes del lugar. Y lo hizo de la mano de Mercedes Álvarez, directora de cine que encontró en esta peculiar confluencia de caminos el contenido de su primer largometraje documental, El cielo gira . En él, la realizadora quiso atrapar con su cámara la paulatina extinción del escenario de su infancia y de la de sus antepasados, comparándola con la situación de un artista, Azketa, que en principio se enfrentaba al final de su faceta creadora.
Sin embargo, lejos de poner fin a su carrera, el pintor navarro ha continuado narrando historias con sus pinceles y hoy, sábado, vuelve a Aldealseñor con la intención de mostrar su trabajo a quienes le guiaron y acompañaron en aquella aventura audiovisual.
De nuevo junto a Mercedes Álvarez, Azketa presentará en el nuevo hotel Torrealdealseñor una exposición con una veintena de obras creadas entre 2000 y 2004.
Un camino de ida y vuelta es el título de esta muestra que ocupa dos plantas de la torre del palacio que en El cielo gira se sumía en las ruinas y que hoy es un alojamiento que espera mantener vivo el enclave soriano. "Me alegra estar aquí", contó ayer Azketa, satisfecho por poder "regresar y enseñar mi trabajo" en un lugar que le proporcionó tantas "vivencias". Y la magia de este retorno es mayor por cuanto no estaba prevista. "Las cosas han venido dadas, me propusieron esta posibilidad desde el hotel y la verdad es que, aunque al principio creía que ésta era una historia cerrada para mí, ahora pienso que quizá sí tenía algo pendiente con este lugar", señaló el pintor, que ha dividido la exposición en dos partes. En el primero de los dos pisos exhibe "una mirada de naturaleza, más cercana, a pequeños lugares y rincones", relacionada por paisajes del norte, "por los colores, ambientes, agua, humedad", aunque también incluye alguna estampa de las Bardenas. En el segundo, "el ambiente es más mediterráneo" y las pinturas se abren a las arquitecturas, paredes y casas, que, construidas por el ser humano, se asoman al mar. Este conjunto incluye, asimismo, paisajes de viajes recordados por Azketa que, en cambio, no exhibe ninguno de los trabajos sobre la localidad, "porque ya no los tengo" y porque, de algún modo, en su retorno quiere ofrecer cosas nuevas a quienes compartieron con él aquella experiencia.
RESISTENCIA Una de aquellas personas, aunque al otro lado de la cámara, fue Mercedes Álvarez, que ayer reconocía que la inauguración de hoy podría ser "como cerrar un círculo". "Durante mucho tiempo, la gente del pueblo vio a Pello tomando apuntes, pero nunca su pintura, y ahora pueden hacerlo", apuntó la directora, que lamentó que, pese a la apertura del hotel, la localidad sigue despoblándose, no en vano "ahora hay cuatro vecinos menos que entonces". De la labor del artista navarro, Álvarez admira la "batalla" que ha establecido con la luz, sin renunciar nunca a nada, sino optando por un camino diferente que tiene que ver más con la investigación y con "ir directamente a la esencia de las cosas, lo que hace que su trabajo sea muy interesante". Tanto, que reconoce que no le sobraría una cámara para captar cómo, tres años después, los vecinos de Aldealseñor se reencontrarán con aquel pintor que un día atrapó con su pintura, lo mismo que ella con su cine, unos paisajes que pronto desaparecerán sin más estrépito que el silencio.
Pendiente de estreno en Nueva York
Con su primer largometraje, El cielo gira , Mercedes Álvarez, que contó con la colaboración de Arturo Redín en el guión, cosechó con un notable éxito que incluye premios en destacados festivales de cine documental, caso de los certámenes de París y Rotterdam. Asimismo, tuvo mucha fortuna en el ámbito de la distribución internacional, no en vano, por ejemplo, el actor mexicano Gael García Bernal compró los derechos para exhibirla en su país. Y la historia continúa porque el filme, producido por José María Lara, está pendiente de estreno en Estados Unidos, ya que ha sido comprado por la distribuidora independiente New Yorker. Sin embargo, de algún modo, Álvarez considera que ya es hora de despegarse de esta historia después de "estar tres años acompañándola" Ahora piensa en nuevos proyectos, pero con calma y con la intención de abordar un tema que le resulte interesante y que le permita trabajar con la misma "libertad y tranquilidad" con la que pudo realizar su primera y exitosa experiencia en el largo documental. > A.O.L.